La pandemia afectó la salud mental de siete de cada 10 venezolanos
La enfermera Yanitza lidia con el miedo al contagio mientras cura enfermos en un hospital de Caracas. En el Zulia, en el occidente de Venezuela, Eli, una pastora evangélica, sufre el duelo por la muerte de su hija; y Gabriel, un psicólogo que vive en Nueva Esparta, sobrevive a la depresión que lo llevó a tener pensamientos suicidas.
Estas son apenas tres historias de las recopiladas por Efecto Cocuyo para el especial “Venezuela sin Terapia: los estragos que dejó la pandemia en la salud mental”, a través de un sondeo respondido por 1.152 personas, del 12 al 24 de mayo de 2021, y que permitió construir una base de datos con información independiente.
Esta consulta, difundida por redes sociales y diseñada con el apoyo de la psicóloga clínica Trinabel Marsuian y el psicólogo y codirector de la ONG Reacin (Red de Activismo e Investigación para la Convivencia) Manuel Llorens, permite concluir que al menos siete de cada 10 venezolanos sienten que la pandemia afectó su salud mental.
Otro hallazgo del estudio es que seis de cada 10 venezolanos registran una alteración en los hábitos alimenticios o del sueño asociado al COVID-19. Las afecciones que más prevalecen en las respuestas de opción múltiple son: alteración en los hábitos alimenticios o del sueño (65,7%), desánimo o desmotivación (62,6%), pesimismo acerca del futuro (57,5%) y miedo a que pueda suceder algo terrible 45,6%.
Un porcentaje menor de los que participaron manifestó tener pensamientos o ideas suicidas. Este grupo representa 10,9% de los encuestados (126 personas) disgregados de la siguiente manera: hombres (44), mujeres (81) y una persona no binaria.
Sin embargo, esta cifra es apenas un subregistro. El Observatorio Venezolano de Violencia estima que 23.000 personas intentaron quitarse la vida en 2020, lo que equivale a un suicidio cada ocho horas. El 78,2% de los casos ocurrieron desde que se decretó la cuarentena en marzo de 2020.
Las mujeres son las más vulnerables. Según los resultados del estudio, 589 indicaron que el COVID-19 las afectó psicológicamente versus 241 hombres.
Aunque este dato guarda relación con el hecho de que son las mujeres las que más respondieron la encuesta, la Federación de Psicólogos de Venezuela también documenta que 70% de las solicitudes que recibieron, entre mayo de 2020 y enero de 2021, en su Programa de Psicólogos Voluntarios que ofrece primeros auxilios psicológicos, pertenecen al género femenino.
Este dato también refleja la tendencia mundial, de acuerdo con un estudio publicado en la revista “Psychiatric Times” el 20 de enero de 2021.
El sondeo hecho por Efecto Cocuyo, establece que los grupos etarios más afectados son: los adultos de 50 años en adelante (45,2%), los adultos entre 41 y 50 años (21,7%) y los jóvenes entre 31 y 40 años (15,6%).
Los adolescentes entre 18 y 27 años también son identificados como un grupo vulnerable por la Federación de Psicólogos de Venezuela.
Mapa de enfermedades psicológicas
Los habitantes de Distrito Capital y los estados Zulia, Miranda, Lara y Carabobo son los que presentan más desánimo o desmotivación, alteraciones en los hábitos alimenticios o del sueño, ataques de pánico y pensamientos suicidas, registra el estudio de Efecto Cocuyo.
En el occidente del país, la Fundación Rehabilitarte reportó una prevalencia de síntomas vinculados a estados depresivos en la población del Zulia durante febrero de 2021. El 59,49% de los participantes que fueron consultados (de una muestra de 743 personas) manifestó experimentar de manera frecuente sentimientos de tristeza o desesperanza, específicamente personas de 19 a 25 años y de 51 a 65 años de edad.
En su opinión, la psicología del paciente con COVID-19 se caracteriza por la preocupación excesiva, la sensación de perder el control emocional, los trastornos del sueño, la ansiedad y los miedos.
Para el psicólogo y presidente de la Federación de Psicólogos de Venezuela, Juan Carlos Canga, la afectación de la salud mental del venezolano es multidimensional porque la pandemia impactó en un contexto de emergencia humanitaria compleja:
Los cinco motivos de consulta más frecuentes que registra Psicólogos Sin Fronteras (fundación que ofrece atención psicológica gratuita en el país) son: el síndrome ansioso depresivo, los conflictos por violencia intrafamiliar y de género, crisis de pánico, trastornos adaptativos y trastornos provocados por los duelos no superados.
Efecto Cocuyo encontró que solo 4,16% de 264 centros de salud monitoreados (240 hospitales, 10 Centros de Diagnóstico Integral, 11 ambulatorios y 4 del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales) en los 335 municipios responden llamadas de emergencia. Las líneas telefónicas, registradas por el Ministerio de Salud, no funcionaban, estaban ocupadas o desconectadas.
Del total de la muestra analizada sólo 17 % presta servicio de atención psicológica y psiquiátrica. Para confirmar estos datos, los reporteros hicieron 625 llamadas, durante tres meses, en tres horarios diferentes (10:00 a.m, 3:00 p.m y 6:00 p.m). También contactaron a los presidentes de los Colegios de Psicólogos de los estados Zulia, Carabobo, Yaracuy, Táchira, Bolívar, Distrito Capital, Miranda, Aragua, Trujillo, Anzoátegui, Lara, Barinas y Monagas, así como a psicólogos privados en las entidades restantes.
La psiquiatra Aura Azócar de la Sociedad Venezolana de Psiquiatría coincide con este alarmante diagnóstico:
La psiquiatra estima que actualmente prescriben el doble de psicofármacos que antes, específicamente ansiolíticos, antidepresivos y antipsicóticos. En cuanto a las consultas, calcula que aumentaron el triple en la pandemia, aunque la sociedad no tiene estadísticas consolidadas sobre esto.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que menos de la mitad de las personas que sufren algún desorden mental recibe atención médica. En su Atlas de Salud Mental, publicado el 8 de octubre de 2021, revela que en 2020 sólo 51% de los 194 estados miembros tenía un plan nacional de salud mental ajustado a los estándares internacionales de derechos humanos.
La Organización de las Naciones Unidas advierte que la próxima gran pandemia será de salud mental si no se toman medidas. Antes del COVID-19, la OMS calculaba que cerca de 450 millones de personas estaban afectadas por algún tipo de trastorno psicológico y cerca de un millón se suicidaba al año.
Los gremios científicos y médicos aún no han podido determinar el origen del virus, pero acumulan cada vez más evidencia que establece una relación causal entre el COVID-19, las enfermedades cerebrales y los trastornos psiquiátricos.
Ante este problema que afecta a la población mundial, Efecto Cocuyo presenta los resultados de su encuesta sobre el impacto del COVID-19 en la salud mental de quienes viven en Venezuela.